Una señora embarazada de unos 8 meses subió a un autobús y notó que el hombre que estaba frente a ella le sonreía.
Ella inmediatamente se movió a otro asiento.
Esta vez la sonrisa se transformó en una mueca, por lo que se movió nuevamente.
El hombre parecía más divertido.
Cuando en el cuarto movimiento el hombre comenzó a reírse a carcajadas, ella se quejó al conductor y éste mandó arrestar al hombre.
El caso llegó a los tribunales.
El juez le preguntó al hombre (de unos 20 años) qué tenía que decir en su defensa.
El joven respondió: Bueno, señoría, fue así: cuando la señora subió al autobús, no pude evitar notar su condición.
Ella se sentó debajo de un cartel que decía: “Vienen los Double Mint Twins” y yo sonreí.
Luego se movió y se sentó debajo de un cartel que decía: “El linimento de Logan reducirá la hinchazón”, y tuve que sonreír.
Luego se colocó debajo de un cartel de desodorante que decía: “El gran garrote de William funcionó”, y apenas pude contenerme.
PERO, Su Señoría, cuando ella se movió por cuarta vez y se sentó debajo de un cartel que decía,
“Los neumáticos Goodyear podrían haber evitado este accidente”, simplemente lo perdí.
“¡CASO DESESTIMADO!”