Una joven se estaba preparando para su boda.
Ella le pidió a su madre que saliera a comprar un bonito y largo negligé negro y que lo colocara con cuidado en su maleta para que no se arrugara.
Mamá se olvidó hasta el último minuto, así que salió corriendo y solo pudo encontrar un camisón corto rosa.
Ella lo compró y lo echó en la maleta.
Después de la boda, la novia y el novio entran en su habitación de hotel.
El novio estaba un poco cohibido, así que le pidió a su nueva esposa que se cambiara en el baño y le prometiera no mirar mientras él se preparaba para dormir.
Mientras estaba en el baño, abrió su maleta y vio el negligé que su madre había echado allí.
Ella exclamó: “¡Oh no, es corto, rosa y arrugado..!”
Entonces su novio exclamó,
“¡Te dije que no miraras..!”