Un hombre que vendía sombreros fue a una jungla para descansar. Un mono vino y robó un sombrero.
El hombre no pudo atrapar al mono. Se dio cuenta de que el mono seguía las acciones del hombre.
Él arrojó el sombrero al suelo. El mono tiró el sombrero al suelo. Recogió ambos sombreros y se fue.
El hombre luego tuvo un nieto que siguió el negocio familiar y vendió sombreros. El nieto fue a una jungla para descansar mientras vendía sombreros.
Un mono vino y robó un sombrero.
El nieto pensó en la historia de su abuelo y arrojó el sombrero al suelo.
El mono corrió y recogió el sombrero.
Luego le dio una bofetada al nieto, diciendo: “¿Crees que eres el único que tiene un abuelo?”