Un grupo de amigos de 40 años de edad se junta para cenar y luego de discutir dónde ir,
deciden ir al restaurante “La Buena Mesa”, porque las camareras están muy buenas.
Cuando cumplen 50, nuevamente se juntan,
y deciden ir otra vez a “La Buena Mesa”, porque la comida es muy buena y tiene una extensa carta de vinos.
A los 60, van de nuevo al mismo restaurante, porque allí se puede cenar tranquilamente y no se permite fumar.
Cumplidos los 70, la decisión es ir a “La Buena Mesa”, pues tiene facilidades para sillas de ruedas y un ascensor.
Diez años después, con 80, tras la habitual discusión, eligen ir a
“La Buena Mesa”, dado que nunca habían ido a ese restaurante antes