Un día un calvo se murió de un machetazo que le dieron en medio de la cabeza,
pues resulta ser que va a dar al cielo, pero para entrar al cielo tenían que hacerlo por
una puerta muy pequeña donde tenían que entrar agachados y
San Pedro al otro lado de la puerta les ponía la mano y les veía
el record de pecados para ver si se merecían el cielo o no, al ser el turno del calvo,
al entrar mete primero la cabeza y en eso grita san pe*** hey!! un momentito, de culo nadie me entra!