La mamá de Jaimito le encarga que vaya a comprar huevos a la tienda.
Jaimito sale y se encuentra con una gran desfile; un circo europeo había llegado a la ciudad.
Jaimito se emociona por los curiosos animales, especialmente un enorme mono.
Va corriendo a su casa y le dice a su mamá:
– Mamá, he visto un desfile increible; había un mono inmenso.
Su madre le pregunta:
– Y cómo era?
– Tenía las manos grandes, uno pies gigantescos…
– Oye, y los huevos? – le interrumpe su mamá.
– Uy pues los tenía enormes!