Un día esta niña, que lleva falda, sale a jugar con sus amigas.
Ella va al parque y conoce a un chico.
Hablan de trepar árboles.
El niño le dice a la niña: “Sube a ese árbol”.
La niña sube y el niño simplemente se queda allí parado y mira los pantalones de la niña.
Después de un rato la niña vuelve a casa y le cuenta a su madre lo sucedido.
Su madre dice: “Oh, mi estúpida niña, él simplemente se quedó allí parado y miró tus pantalones”.
Al día siguiente volvió a salir con la falda puesta y se encontró otra vez con ESE chico.
Él le dijo que volviera a subir y ella lo hizo.
Cuando llegó a casa, le contó a su madre lo que había pasado otra vez y su madre le dijo: “Estúpida niña, él se quedó allí parado mirándote los pantalones”.
La niña respondió y dijo: “No, en realidad lo engañé, ¡esta vez no llevaba pantalones!”