Un joven llega a casa y dice, “Papá, acabo de sacarme el carné de conducir y me gustaría usar el coche familiar”.
Su padre le responde: “Muy bien, hijo.
Pero primero tienes que sacar buenas notas en la escuela,
mantener tu habitación limpia, asegurarte de que el patio está limpio y cortarte el pelo”.
“Vuelve dentro de unos meses y ya veremos”.
Bien, pasan varios meses y el joven entra en casa con su boletín de notas en la mano.
“Papá, he sacado muy buenas notas en mi boletín de notas”.
“He mantenido mi habitación tan ordenada como un alfiler, y el patio está siempre en forma de barco”.
“¿Qué tal si me dejas usar el coche ahora?”
Su padre responde: “Todo eso es cierto, pero hijo, no te has cortado el pelo”.
El hijo se lamenta: “¡Pero papá, Jesús tenía el pelo largo!”.
Su padre responde,
“Sí, hijo, tienes toda la razón,”…
“¡Y andaba por todas partes!”