Dos hombres se encuentran por la calle y uno le dice al otro
Hombre, Juan, qué alegría, chico, ¿cómo has cambiado? Antes eras bajo,
y parece que has crecido, antes eras gordo y ahora eres delgado, antes eras moreno y ahora eres rubio…
De repente lo interrumpe el otro y le dice:
Pero, ¡si es que yo no soy Juan!
¡ Cielos!, replica el primero, ¡también te has cambiado el nombre!