Un señor se levantaba todos los días muy temprano por la mañana para ir a vender helados y no le iba muy bien con la venta.
Un día llega a su casa y le dice a la esposa,
“mi amor voy a tener que dejar de vender helados,
no me va nada bien. Además estoy cansado de levantarme tan temprano.” La esposa le dice
“mi vida, mañana yo voy a ir, y voy a tratar de ver si puedo vender los helados y tu te puedes quedar a descansar”.
Al siguiente día, la esposa se levanta bien temprano y se va a vender los helados.
En la tarde, regresa a la casa con mucho dinero en las manos.
El esposo bien sorprendido le dice, “mi vida, y solo de helado hiciste eso!
La esposa contesta: “no boca arriba, boca abajo de todos lados mi amor!!!