salina
Hay un hombre y una mujer mayores sentados en el solárium de una residencia de ancianos.
El anciano le dice a la mujer: “Por cinco dólares haré el amor contigo en esa mecedora de allí.
Por diez dólares, haré el amor contigo en ese sofá.
Pero por veinte dólares te llevaré a mi habitación, encenderé unas cuantas velas y te daré
una velada romántica y apasionada que nunca olvidarás.
La mujer lo considera un momento y luego, después de buscar en su bolso, saca un billete de veinte dólares.
El hombre dice: “Entonces quieres pasar la noche romántica en mi habitación, ¿eh?”
La mujer responde: “No, quiero cuatro veces en la mecedora”.
